Se despejan las dudas de la mayoría de los colombianos con el tema actual de la Constituyente con el que el mandatario tiene en ascuas a quienes no están de acuerdo y con el que ha conseguido que los anteriores debates como de la corrupción, la paz total, el decrecimiento económico, la salud, entre otros muchos, hagan olvidar por el momento la atención de los habitantes. Según su lógica no interesa la forma sino el fondo. Quiere la reelección. 

Por: Leopoldo Portilla Mesa. 

Diez meses de hastío, escándalos diarios a diestra y siniestra serían causales para obligarle a dejar el cargo de inmediato. La financiación ilegal de la campaña y la violación de los topes, acuerdos con criminales en las cárceles por los cuales se ganó las elecciones, apoyos ilícitos de distinto tipo (desde dinero hasta aviones), aportes no reportados de contratistas y de personas al margen de la ley, maletas de dinero, amenazas de revelar cosas tan graves que “todos se van a la cárcel y el gobierno se cae”, abusos de poder, chuzadas y polígrafos ilegales, suicidios de oficiales de policía, y un largo etcétera. Y todavía adopta la situación de víctima. Qué falso. La incoherencia en sus narrativas presenciales y vía X confirma su enfermedad -mitómano puro- imagen desdibujada imposible de maquillar a pesar del esfuerzo de sus áulicos, que buscan de cualquier manera, hacerle el esguince a la Constitución del 91 para convocar una Asamblea Constituyente. El autogolpe está a la vista o toma por la calle del medio es el pensamiento del ciudadano de a pie que se convence de la pésima gestión del gobierno considerado como el más corrupto de las últimas cuatro décadas. Irrespetuoso, falto de seriedad, además de querer transgredir las reglas institucionales hace que el concepto nacional e  internacional le considere como el peor en el continente. Una muestra de sus desaciertos es el piloto que aplicó al nuevo régimen de salud de los profesores que terminó en protesta nacional porque no hubo atención médica, ni entrega de medicamentos para ninguno de sus afiliados. Sin solución todavía. Adicional a esta situación es la petición hecha por otra de las grandes -EPS, Sura- de aceptar un desmantelamiento progresivo, lo cual dejaría por fuera a cinco millones y medio de usuarios que sumados a los de -Compensar EPS- y de SANITAS ya intervenida, da como resultado una cifra cercana a los quince millones, que no tienen en este momento donde recalar. Improvisación Total del gobierno que muestra con estas decisiones precipitadas su ambición al dinero para manejarlo a su antojo. Igual acontecerá con la reforma a las pensiones. Moción de censura al ministro de Salud, al igual que al de Defensa y de la ministra de la Igualdad cursa en el Congreso que finaliza su legislatura en pocos días. 

El inquilino de la Casa de Nariño pareciera estar acorralado, ejerciendo una violencia psicológica extrema, de forma sistemática y recurrente pero sin saber durante cuánto tiempo más. Por lo menos creen los ciudadanos que si la mente encuentra tranquilidad será hasta el 7 de agosto del 2026