Un año y más y el mundo sigue en el tsunami sanitario producido por el enemigo letal del coronavirus que en su permanencia terrenal ha producido dos millones y tantos de fallecidos. La manera de combatirlo son las vacunas, esperanza del universo, para encontrar la estabilidad que tanto se desea.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

La perplejidad y el temor que ha sembrado esta pandemia en el interior de los seres humanos nadie se la había imaginado. Es una verdadera hecatombe de la que costará demasiado tiempo para reponerse. La vacilación en todos los órdenes de la vida con miras al mediato futuro no despega por su culpa. El desarrollo, la evolución, están convertidos en un verdadero misterio. El mundo escondido, irresoluto para avanzar.

Por eso ahora se tiene que hablar anteponiendo la frase de… si el coronavirus lo permite… Sevilla la capital andaluza de la que el globo terráqueo está pendiente por todo lo que posee, y por estas fechas especialmente, de lo que pueda acontecer por lo menos con una corta realización de su feria y de su fiesta taurina tan universal y deseada. Este martes, el alcalde Juan Espadas como la empresa Pagés se reunieron para hablar sobre la posibilidad de permitir la celebración de su tradicional feria en su mínima expresión, igualmente de una comprimida feria taurina. El Domingo de Resurrección ya no será el 4 de abril sino el 18. Torearían Morante de la Puebla, Roca Rey y Pablo Aguado -arte puro- con los toros de D. Victoriano del Río.  La temporada seguiría con festejos en los fines de semana del 22 al 25 de abril, y el del 29 y 30 de abril, y 1 y 2 de mayo. Habrá un festejo de rejones en este ciclo. Se confirma la intención de Morante de lidiar la corrida de Miura. El resto de la temporada se conformará con algunas novilladas entre mayo y junio, así como el ciclo de San Miguel. Las actividades, actos públicos -no todos- podrían hacer parte integral de la feria.

Hace unos pocos días y para seguir hablando de Sevilla, aparecieron las declaraciones del abogado-taurino oriundo de esa tierra Joaquín Moeckel refiriéndose al blindaje necesario y urgente de la tauromaquia por el cual él se inclinaría a buscar la protección de la UNESCO.  Entre otras cosas manifestó a los colegas de aplausos.es que… “Entiendo que con la situación que está viviendo la Fiesta la única manera de protegerla sería a través de una protección de carácter internacional.

• La ley que declara a la tauromaquia Patrimonio Cultural Inmaterial es una ley que puede ser perfectamente modificada en el Congreso de los Diputados pues igual que se aprueba, se modifica o se deroga. Por ello una ley nacional no es suficiente blindaje para la tauromaquia pues si una mayoría de minorías, cual es el Gobierno actual, votara una ley que derogara o modificara la presente, nos dejaría sin nada”.
• “Me inclinaría por la UNESCO, porque no es tan fácil cambiar las cosas, no es cuestión de mayorías. Ahora mismo lo que estamos recibiendo por parte del Gobierno es un ataque sibilino y será así mientras siga siendo importante la bolsa de votos de la tauromaquia”.

Una idea a tomar en cuenta no solamente en España, país en donde más espectáculos taurinos se daban en el año, sino también valdría la pena, que las naciones iberoamericanas entraran en contacto con éste profesional y se unieran en busca de obtener el blindaje del que habla el ilustre aficionado y profesional del Derecho.

¿Se acabaría primero el coronavirus que los animalistas? Seguramente que sí, pero los descafeinados, desequilibrados, nazistas-animalistas quieren que el Estado absorba a la sociedad civil y someta toda la vida social a una especie de selección ideológica.