El pintor colombiano Diego Ramos tiene en máximo secreto su obra que engalana el Coliseo de Arles y que solamente se verá el próximo sábado -11S- en el Coliseo de Arles con motivo de la reaparición del diestro Alejandro Talavante. Expectativa grande reina en la ciudad francesa por este acontecimiento. Corrida goyesca en la que sostiene un mano a mano con el peruano Roca Rey.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

Arles seguramente tendrá un capítulo aparte en la historia de la tauromaquia por todo el movimiento que viene produciendo la celebración de la corrida goyesca en la que reaparece el espada Alejandro Talvante, en un tiempo tan convulsionado por la pandemia del coronavirus y que aún no termina. Regreso del torero que después de casi tres años de ausencia de los ruedos, le trae una nueva ilusión, misma que había perdido, en aquella corrida de la Feria de El Pilar de Zaragoza.

La genialidad pictórica de Diego Ramos engalana este acontecimiento considerado el más importante del calendario, cita cultural y artística a la que también acude un relevante torero de excelsas cualidades venido del país andino del Perú -Roca Rey- para hacer parte también de la historia. Como lo hará la obra vanguardista, de caminos existenciales, de sabores, colores, elegancia, personalidad y fantasía del pintor colombiano, arte enmarcado dentro de la nueva modernidad. Interpretación y sensación recibida según la sensibilidad. El día se acerca -11 de septiembre- y las instalaciones del histórico Coliseo Arlesiano estarán abarrotadas, con autorización del gobierno galo. Todo el tejido turístico estará igualmente copado. Será la expresión más importante del arte del toreo y de la pintura. ¡Que Dios reparta suerte!

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