La llegada del nuevo año 2024 es recibido por el gobierno de Colombia con una bomba informativa la cual es casi que imposible cambiar la decisión de la empresa Panam Sports. La pérdida de oportunidad que la ciudad de Barranquilla -la que más ha crecido en los últimos años- le fue revocada la sede para celebrar los Juegos Panamericanos y paralímpicos 2027 por el incumplimiento de los pagos a que se había comprometido el gobierno nacional.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

Se pensaba que el nuevo escándalo no fuera tan rápido y que se diera en los primeros días del año nuevo tampoco, pero el ADN de este desgobierno no hace pausas en su desenfreno de continuar por el sendero de la desaceleración de la economía a la que desea ver postrada con el anuncio de una nueva reforma tributaria que se constituye en un engaño al ofrecer a las empresas bajar el impuesto de renta corporativa del 35% al 20% y en cambio aumentar ese gravamen a la renta de personas naturales de mayores ingresos. El anhelo es cuadrar la caja de ingresos, después de algunos fallos de la Corte Constitucional  que dejaron sin efecto fuentes ya previstas, como la prohibición de la reducción de las regalías del impuesto de renta. Son varias las reformas que propone con el fin seguramente de proseguir con el derroche del dinero de los colombianos para invertirlo en otra de las genialidades que hizo pública, entre otras, el pasado fin de semana en el convulsionado departamento de Arauca, territorio tomado desde hace muchos años por sus amiguetes del ELN con quienes sostiene diálogos para lograr su utópico objetivo de la Paz Total,  a través de sus delegados encabezados por Vera Grave otrora perteneciente al M19. Palabras más… palabras menos… propuso a los elenos que dijeran cuanto valía su firma para obtener la paz y el Estado les entrega el dinero y punto.

Pero la cereza del pastel del 2024 es la puesta en evidencia de la absoluta negligencia de su ministra de Deporte -y del mismo Gustavo Petro que según la ministra le manifestó que eso era mucha plata- enredada en el incumplimiento del pago de los ocho millones de dólares a la empresa Panam Sports (la anterior ODEPA) que había otorgado la sede a la ciudad de Barranquilla para celebrar después de cincuenta años los Juegos Panamericanos 2027, oportunidad y decisión que seguramente no será reversada por el presidente -Nevec Ilic-. Dice Panam Sports en su comunicado que el pasado 19 de octubre en una reunión en Santiago de Chile y tras recibir una carta oficial de las autoridades colombianas, “Barranquilla solicitó una prórroga  en los plazos para poder cumplir con el contrato. La propuesta fue aceptada por Panam Sports, teniendo una nueva fecha el 30 de diciembre 2023 y el 30 de enero de 2024. Sin embargo,  ante la nula respuesta una vez cumplido el nuevo plazo, el comité ejecutivo de Panam Sports con fecha 3 de enero de 2024 ha tomado la determinación indeclinable de retirar el derecho de ser la ciudad sede de la cita continental en 2027”. Finalizó diciendo en el citado comunicado que “Panam Sports  lamenta profundamente esta situación, pero la decisión ha sido tomada pensando en el futuro del máximo evento multideportivo de las Américas y en los atletas del continente”. Otra barbaridad monumental del gobierno. No se sabe si esta u otras puedan ser la gota que rebosaría la copa. ¿Lo de la doble nómina y el escándalo de los pasaportes ya pasó? Escándalos que son una muestra del desastre del gobierno que todavía no encuentra el norte. Esto debe tener un costo político. La Renuncia inmediata de la Ministra y un continuo castigo político al gobierno por su total inadvertencia. Este martes -9 enero- el presidente citó a los más comprometidos dirigenes del deporte nacional a la Casa de Nariño para encontrar una fórmula que haga desistir a los directivos de Panam Sports. Muchas dudas existen al respecto. Veremos que pasa.