Parece enrumbarse por el sendero del triunfo el serial de San Fermín. Han triunfado en grande Miguel A. Perera y Ginés Marín. Tres orejas pasearon (1-2) respectivamente ante el público que desbordó en alegría. Daniel Luque con la gran dimensión que se le conoce no acompañó por la cicatería del palco.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

Una tarde más en la que se grita ¡Viva San Fermín! El triunfo de la terna Perera, Marín y Luque aunque este último solamente paseó una oreja del segundo de su lote, su exposición artística que ya se le conoce  y bien firmada en ambos casos, el asesor se le atravesó al negarle un apéndice del 2º de lidia ordinaria, decisión que no permitió que Daniel saliese en hombros al igual que sus compañeros de cartel.

Miguel Angel Perera entendió perfectamente a los de su lote. Encajado, firme, mostró que su recorrido viene en alza, motivado por el buen momento, acopló la embestida noble y con clase de los ejemplares de Fuente Ymbro a (excepción del 2º y 5º) que le permitieron mostrar los argumentos  fundamentales de su tauromaquia. Inexplicable dicen los entendidos porque este torero no se encuentra en la baraja de los ases.

Ginés Marín aprieta e incómoda por lo buen torero que es. Reúne muchas cualidades que le colocan en el umbral de los escogidos. Talentoso y fino en su labor. Dominador como lo demostró en su 1º (1oreja) y en el serio 6º en una faena de menos a más. (2 orejas).  Otra tarde de éxito para la Casa de la Misericordia que tan ejemplar obra social viene realizando décadas atrás.