Nuevas medidas acordadas entre las autoridades sanitarias y culturales de la nación lusa sobre la apertura y celebración de espectáculos taurinos entraran en vigencia a partir del primer día del mes de julio 2020.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

Atendiendo las peticiones de la totalidad de los diferentes estamentos del sector taurino las autoridades sanitarias y culturales acordaron en la reunión sostenida con los interesados que los espectáculos taurinos se pueden celebrar en el territorio lusitano cumpliendo las estrictas medidas de seguridad y protocolos de sanidad que exige la ley, según lo ha publicado la web Farpas.

Las medidas que se deberán cumplir son las siguientes:

En una primera fase del desconfinamiento de la tauromaquia, a partir del 1 de julio, solo se puede utilizar el 50% del aforo de las plazas de toros. Será a partir del 1 de agosto, en una segunda fase, cuando se podrá disponer de la totalidad del aforo.

Durante la primera fase del mes de julio solo se pueden celebrar festejos si las plazas disponen de asientos numerados y el público no podrá estar de pie, de modo que se excluyen algunas plazas de toros portátiles en las que el público no está sentado.

Entre espectador y espectador habrá que dejar libre solo una localidad, esa es la distancia de seguridad permitida. Las personas de una misma familia o que convivan en el mismo domicilio sí pueden estar juntas.

Las plazas de toros deberán desinfectarse adecuadamente antes y después del espectáculo por parte de empresas especializadas y en las entradas habrá gel hidroalcohólico desinfectante. El público tendrá que usar mascarilla solo a la entrada y salida de la plaza, pero no es necesario que la lleve durante el espectáculo si está al aire libre. Si es plaza cubierta, es obligatorio su uso durante el festejo.

Las entradas a las plazas se abrirán con dos horas de antelación para evitar aglomeraciones de personas en las entradas, incluso estas tendrán que estar a dos metros de distancia entre sí en las líneas de espera para acceder al coso. Las salidas se realizarán por fases y de sector a sector, con una distancia de seguridad de dos metros entre los espectadores.

En esta primera fase los bares de las plazas de toros no estarán abiertos. Además, se instalará una carpa o habilitarán dependencias con profesionales sanitarios listos para recibir a cualquier persona enferma que pueda evidenciar síntomas del coronavirus.

Los toreros participantes deberán permanecer con distancia de seguridad cuando estén en el callejón sin salir al ruedo. Habrá una reducción drástica de personal en los callejones.

Entre otras medidas, se encuentra la de desinfectar adecuadamente las banderillas.