Casi lleno en los tendidos de Las Ventas de Madrid . Diferentes ganaderías se lidiaron con ejemplares de diversos comportamientos.

Toro de La Ventana del Puerto, noble pero débil de remos, sobresalió la primera tanda por el pitón derecho, decreciendo en las posteriores series. Pinchazo hondo y descabello. Pitos al toro y silencio al diestro de Lorca.

El segundo ejemplar de Domingo Hernández embistió con presteza a la cabalgadura de Sandoval, quite jaleado por chicuelinas. Con la muleta inició por estatuarios empalmando serie de naturales templados. Con la mano derecha permitió a Ureña torear con pureza y temple hasta que la faena fue bajando de tono en su parte final. El toro  noble y con calidad. Tres cuartos de espada en buen sitio. Palmas al toro y ovación.

El tercero con el hierro de Adolfo Martin fue un ejemplar complicado, sin humillar y difícil para banderillear. Por el pitón derecho recostándose peligrosamente y por el derecho con medias embestidas. Pinchazo, estocada entera y varios descabellos. Pitos al toro Silencio.

El cuarto de José Vázquez no se dejó picar rehuyendo el castigo en tres oportunidades. Tuvo mejor condición en la muleta en la que embistió con cierta codicia pero sin continuidad, complicando al torero para construir una faena ligada. Mal con la espada pinchando repetidamente hasta llegar en la cuarta oportunidad a pasaportar la res. Pitos al toro. Silencio.

Con el hierro de Juan Pedro Domecq salió el quinto que se devolvió después de verse con debilidad en sus remos delanteros. Salió el bis de la ganadería de El Conde de Mayalde donde se produjeron momentos importantes con series templadas de mano muy baja e incluso remates mirando a los tendidos. Estocadón sin puntilla en medio de la lluvia natural y de almohadillas. Oreja.

De Victoriano del Rio fue el sexto al que le instrumentó quite por gaoneras. Estuvo firme y plantándole cara a un toro sin humillar y saliéndose de la muleta, buscando los terrenos de adentro mostrando mansedumbre. Pinchazo y ovación.