Por: Néstor A. Giraldo Mejía

Tres cuartos de entrada en la decimoséptima corrida de la feria de San Isidro con tarde lluviosa. Toros de Adolfo Martin de impecable presencia. 

Buen toro que fue a más de Adolfo Martin, echando el morro abajo con clase y Fernando Robleño en labor templada sobre todo en tandas por el pitón izquierdo. Estocada defectuosa con pinchazo. Saludo tras aviso. El quinto ejemplar con nobleza, clase, recorrido y humillación y Robleño con series por el izquierdo con temple y profundidad. Lo intentó por pitón derecho pero por allí se quedaba corto. Pinchazo, estocada y descabello. Petición denegada y 2 vueltas. 

Román exhibió un toreo decidido con planta firme, de mucho valor con un toro humillado, con clase pero sin repetir las embestidas, quedándose muy parado. Tres pinchazos y bajonazo. Silencio. Con el cuarto hubo también mucha decisión y porfía quedándose en los pitones del ejemplar que careció de casta quedándose también muy parado dejándose arrancar apenas muletazos aislados del torero. Pinchazo trasero y descabello. Silencio. El sexto salto al callejón lesionando una de sus extremidades siendo devuelto. El bis de la ganadería de Pallarés encaste santa Coloma, resultó blando con el que Román lidió a media altura sin que el toro le aportara nada para el lucimiento. Casi entero el acero finiquitó al de Pallarés. Silencio. 

Un toro reservón, sin emplearse, midiendo mucho con peligro hasta cuando le echo mano a José Garrido hiriéndole en la parte anterior de la pierna derecha. Lo pasaportó Fernando Robleño de estocada  y dos descabellos. Silencio. La corrida quedó en mano a mano Robleño – Román.  

Parte médico de la cornada de José Garrido firmado por el Dr. Máximo García Padrós, de una ‘cornada en la parte posterior del tercio inferior del muslo derecho con una trayectoria hacia adelante y abajo de 15 centímetros que produce destrozos en los isquiotibiales y contusiona al nervio ciático. Es trasladado a la Clínica de la Fraternidad. Pronóstico: grave