La Escuela Taurina Inmaculada Concepción que orienta el torero Nicolás de San Juan crece en su parte académica de la cual recibe -además de buenos conceptos-oportunidades- por parte de los entendidos.

Por: Leopoldo Portilla Mesa.

La labor en solidario que viene realizando este torero Nicolás de San Juan creador de la Escuela Taurina “Inmaculada Concepción” con sede en el municipio de Une en el departamento de Cundinamarca tiene ahora el reconocimiento de los entendidos tras una ardua labor de casi dos años en la que los chicos-alumnos cuyas familias residen y laboran en el agro, fervorosamente cada domingo asisten a la clase teórico-práctica que su orientador desinteresadamente dirige y explica.

Ganaderos interesados en mantener esta cantera ofrecen a los más adelantados concurrir  a sus tentaderos a torear las eralas y ver igualmente a los matadores que prueban en ese laboratorio tan decisivo para la ganadería a las futuras madres. Ayuda invaluable sin duda la que prestan, además de la colaboración de la Alcaldía que sin dubitaciones y con afición respaldan a la institución. Andrés Fernando, Juan Pardo, Juan Rojas, Jefferson Rey -nuevo alumno-, son quienes han rematado el curso con un entretenido festival en la plaza de toros del municipio lidiando las eralas y añojas de la ganadería de El Picacho ubicada en la población Cundinamarquesa de Guayabal de Síquima.

El evento tuvo un invitado muy especial. Un niño de apenas 5 años de nombre Alan Criollo Brillón (Foto de rodillas), nieto de un hombre que ha trasegado durante toda su existencia en el mundo del toro -Alfonso Brillón- quien cuenta con orgullo haber sido la primera persona en trasladar sus conocimientos taurinos al infante César Rincón.